Ya estamos en la nave

Pasó para mi percepción vital entre el 2011 y el 2012.

Como en un juego de ajedrez las estrategias fueron cercando algún propósito hasta que sin notar muchos cambios a nivel de realidad general, el contexto era realmente otro.
Los cielos rociados, los medios invadiendo cada neurona, las nuevas generaciones consumiendo virtualidad, todos comiendo plástico.
Abro la heladera de cualquier kiosco y casi todo es the cocacola company. Voy al chino y casi todos los jabones y productos de limpieza son unilever. Por no contar ‘adherezos’.
Mosquitos en otoño.
Las redes sociales conforman el mayor porcentaje de  realidad para mucha gente, aunque editan sus vidas mostrando sólo lo que quieren aparentar. Las publicidades dicen ahora que las imágenes humanas han sido modificadas, abajo en letras chiquitas. Esto quiere decir que lo que vemos nunca es ‘real’. Y desde los celulares mismos editamos continuamente colores y rasgos de las fotos que mostramos.
Cada bebé que nace es convertido inmediatamente en blanco de fotos que los padres muestran a conocidos y desconocidos durante meses o años, ignorando que cualquiera puede ver esas fotos de seres en plena formación etérica y totalmente expuestos y vulnerables a ser atacados por cualquiera que tenga ganas.
Después los quieren proteger de los pedófilos coptadores de niños. Cuando esos bebés llegan a la adolescencia no aprendieron a advetir que todo lo que está en internet es un vapor electrónico sin ninguna veracidad a menos que haga eco en el Core verdadero para la propia experiencia.
Esto es, (para mí) conocer a alguien desde la virtualidad implica desarrollar algun interés profundo que merezca Coordinar el encuentro, la relación previamente ha de tener alguna consistencia para ambos.
Encontrarse con un desconocido solo porque te dijo que lind@ que sos y me gusta todo lo que te gusta y te amo es un atrapabonos sin goyete. Hay algo de todo eso que dicen los pedófilos que realmente denote inteligencia manipuladora o los teens están a la merced de cualquier cosa, expuestos y sin instrucción previa acerca de estos temas?
Mi madre siempre me dijo que no aceptara caramelos ni nada de extraños. Sin embargo en mi adolescencia me encontre con ‘extraños’ varias veces, por entonces el icq era la herramienta predilecta, así como las salas de chat donde entraba y “conocía” gente. Con los años se volvió casi una tara para mí, ya que la gente que encontraba en la salas de chat era muy diferente a la que se me cruzaba en la vida ‘real’.
Tomó un esfuerzo energético extra salir a la vida y esperar a que la marea trajera vínculos “verdaderos”.
Los que conservo de esas experiencias nacidas en la virtualidad han sido de enorme importancia para mí, durante años mantuve amistades virtuales que eran mucho más importantes que cualquier otra persona “de carne y hueso”, dado que las interacciones que tenía con esas personas, esos amigos a los que nunca había visto o escuchado, tenían más consistencia para mi experiencia adolescente. Por aquel entonces los años de confusión y auto-definición y búsquedas de sentido no me permitían hablar de muchas cosas que sentía y o pensaba. Pero sí que las podía escribir y muchas veces sólo se manifestaban luego de horas de chateo por la madrugada.
Por eso me pregunto qué tendrán esos pedófilos que coptan teens a lo loco. Qué es eso que tan desesperadamente quieren los teens que estos tipos saben? La promesa de una aventura un amor? algo excepcional? Lo que los padres prohiben?Morder a manzana?l
Tengo la sensación de que las nuevas generaciones ya están navegando en una ruta intermedia entre lo que puede tocarse y lo que solo puede ser visto mirado o escuchado.
No sé cómo será ahora (quisiera saber) pero por aquel entonces, 1998, antes de conocerse era regla hablar por telefono. De línea. Y ahí también decantaban varias cosas que era muy fácil aparentar por chat pero imposible por teléfono. La voz el tono denotan emociones y otros matices.
Recuerdo que el gran tema con mi amiga Verónica del secundario (que también tenía estas aventuras virtuales, y éramos las únicas dos del grado que andábamos en esas cosas raras muy raras para entonces) era cuál era el margen de irrealidad entre lo que la persona aparentaba o decía que era por chat y luego cómo era realmente en persona. Siempre había un abismo más o menos grande que era mutuo. Por ello requería coraje de las dos partes el encuentro porque gran parte de la fantasía desaparecería para dar paso a otra fase más concreta del vínculo.
¿Por qué sabíamos esto en 1998 con 15, 16 o 17 años?
De qué nave estoy hablando? De la que nos lleva a otra dimensión, donde las reglas son evidentemente diferentes, así como las expectativas, los vínculos, las formas de comunicarnos, los tiempos para cada cosa según las edades. Mutación veloz.
La infancia comenzó a valorarse y tener un lugar en la sociedad moderna en el marco de las primeras revoluciones industriales cuando era necesaria la mano de obra.
Los niños y adolescentes a merced de la sociedad y sin padres a cargo son una vieja historia. Que se sigue contando. Los niños y adolescentes sin contención buscan su manada, entre ellos, o entre adultos.
Poco a poco y mucho a mucho los padres los tutores y los apropiadores de esas infancias, son los medios, las redes, las pantallas.
Gran parte de la energía disponible es donada- absorbida por esta gran web esta enorme red que no se ve que son nuestras neuronas enredadas confundidas con mucho ruido muchas luces muchas promesas mucha información muchos colores.
Muchos padres corren detras de sus hijos, de generaciones que son abducidas por esta red invisible virtual y que es el gran parámetro de lo real. La información mediática la data de las redes la data del googleo. Como si eso fuera todo cuanto hay.
Corren los padres inútilmente porque sus hijos ya no estan ahí, físicamente tangibles y con su ser digital más robusto que el carnal.
En medio de algún proceso de uploadear el ser a la digitalidad. Y qué cuerpo es el que ancla estas experiencias? Cómo pueden proliferar generaciones que no están conectadas con encarnar sino con des encarnar? Vivir en la net.
Ahí es donde sospecho que si no estamos todos en la nave la nave esta sobrevolando y desde hace rato instalada sobre nuestras cabezas. Está en el cielo. Cuando leí Childhood’s end, me parecía graciosa la ocurrencia del autor
 Cómo nadie va a notar que hay una nave gigante cubriendo el cielo. Cómo puede llegar a naturalizarse sejante cosa? Y sin embargo ya está pasado. Y nada parece haber cambiado.
Mirando The sound of music, cuando los nazis invaden Viena, el moto del invasor delegado es “Viena sigue como siempre aqui no ha pasado.nada. nada ha cambiado”.
Yo lo leo en el.orden de lo mismo, los invadores que nadie detecta dado que están en todas partes. Por eso hablaba del jaque, de la estrategia de ajedrez. De a poco se va cercando amablemente al oponente hasta que se ingresa en el territorio y la mayoría parece no notar nada absoluamente nada distinto, están instalados. De repente 2×1,10×5, todo normal.
De repente tenés todo sembrado de soja y tóxicos en lo que comés pero es como siempre o no pero es normal también. Ya te lo explicó la tele y te pareció muy coherente. Y así todo lo que se ha construído socialmente-históricamente.
Desde naturalizar el uso del chupete hasta el forro hasta las máquina expendedoras de dulces y el dinero mismo!!! por DiosCristoMckenna! Nadie se sorprende de como están siendo estando consumiendo las cosas y el tiempo que pasa cada vez más rápido?
Nah seguro que mucha gente sí.
Seguro que muchos sospechan como quien escribe que ya estamos en la nave. Viajando lejos en otra dimensión.